La hora viene, y ahora es

Y sobre todo tenés que saber que...

Iglesia no es un espacio físico en el que se gasta innecesariamente dinero, que podría ser dado a los que lo necesitan, para adornarlo como un árbol de navidad.

Iglesia no es un lugar, edificio o salón en el que la gente va y viene, esperando que en esas visitas ocurra algo místico que les arregle la semana, como si de un bar, prostíbulo o cementerio se tratara.

Iglesia no es un montón de idiotas que se creen mejores a otros montones de idiotas, o superiores a los que no son del montón de idiotas porque se consideran fuera del montón; y solo son parte de un montón diferente.

Iglesia no es una lápida fría con luces de colores y buena música donde me encuentro con la gente que me gusta.

Porque Dios no habita en templos hechos por manos de hombres.

Porque ¿qué fin tienen las cosas banas?

El ostento de las cosas materiales, la grandeza de los templos, la opulencia es para la vanagloria del hombre, mas no para la honra de Dios.

Porque ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo.

Porque habita Dios en lo alto y santo, y también con el contrito y humilde de espíritu.

Iglesia es donde Dios habita, porque la hora viene, y ahora es, que ni en este monte ni en aquella ciudad; sino que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad.

Allí, donde Dios habita, en familia.

‭‭Mateo 12:47-50

Entonces alguien le dijo a Jesús: —Tu madre y tus hermanos están afuera, y quieren hablar contigo.

Pero él le preguntó: —¿Quiénes son en verdad mi madre y mis hermanos?

Jesús señaló entonces a todos sus discípulos y les dijo: —Estos son mi madre y mis hermanos. Porque cualquiera que obedece los mandamientos de mi Padre que está en el cielo, es en verdad mi madre, mi hermano y mi hermana.

Su familia. La Iglesia.

Los que se acercan a hacer la voluntad del Padre y expandir su Reino en esta tierra.